El ministro de Turismo, Francesc Camp y la directora de Marketing y Comunicación de Andorra Turisme, Noemí Pedra, han presentado este martes, 29 de mayo, el impacto que ha tenido la campaña de invierno 2017- 2018 en el sector turístico y comercial. El invierno se ha cerrado con un 1,1% más de turistas respecto al año pasado y los resultados muestran como a nivel global el incremento de entrada de turistas ha sido de un 37,9% si se comparan los datos del periodo del 2012 con los de 2018.

Si se tiene en cuenta el mismo periodo, también se ha constatado un crecimiento del 3,5% de las pernoctaciones de turistas respecto a la temporada anterior y un aumento de la pernoctación media que se sitúa en 3,46 noches.

Esta temporada invernal ha venido marcada por la estabilidad de las cifras, similares a los registros obtenidos durante el mismo periodo del año pasado. Los días de esquí vendidos por las estaciones han aumentado un 2,6% y la ocupación hotelera ha notado un incremento de un 2,4%.

En este sentido el ministro de Turismo expuso que tras varios años de crecimiento importantes ahora será más complicado hacerlo de la misma manera y, por tanto, la estabilidad será la tendencia que se seguirá en las próximas temporadas de invierno.